Procedimientos Asistenciales, SVA: Urgencias traumatológicas: Valoración inicial del paciente politraumatizado
VALORACIÓN INICIAL DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO
La asistencia inicial del paciente traumatizado grave, se realiza conforme a la secuencia de prioridades expuesta en el esquema siguiente, y siempre, atendiendo a los criterios de riesgo vital (vida, órgano, función), posibilidad técnica, y accesibilidad.
Actúe según el siguiente esquema:
- VALORACIÓN DE LA ESCENA
- ESTIMACIÓN INICIAL DE GRAVEDAD
- VALORACIÓN PRIMARIA Y SOPORTE VITAL (RESUCITACIÓN)
- TRASLADO PRIMARIO PRIORITARIO
- VALORACIÓN SECUNDARIA Y ESTABILIZACIÓN
- TRASLADO A CENTRO ÚTIL
VALORACIÓN DE LA ESCENA
Ver procedimiento Valoración de la escena en SVB
- Aproxímese al lugar manteniendo en todo momento las medidas necesarias de seguridad:
- Para su equipo:
- No intervenga en aquellas situaciones en las que la integridad del equipo no esté garantizada.
- Utilice material de protección que preste seguridad activa (ser consciente del peligro y esperar a los equipos de rescate, si la situación así lo requiere) y seguridad pasiva (cascos, gafas, chaleco reflectante, chaleco antifragmentos, guantes, traje NBQ, máscara antigás, equipo autónomo, ropas de protección en situaciones de fuego cedidas por bomberos, etc.).
- Para el/los pacientes: valore la posible situación de inseguridad del paciente y de las personas que se encuentran en su entorno.
- Si se encuentra ante una sospecha de incidente NBQ, priorice la información a la Central de Comunicaciones y tome las medidas de autoprotección de manera estricta (ver procedimiento operativo: NRBQ).
- Evite la visión en túnel (prestar atención a lo más evidente, dejando otros pacientes o situaciones sin atender).
- Preste atención al mecanismo lesional, información importante a tener en cuenta para el diagnóstico de lesiones, tratamiento e incluso pronóstico final. Reséñelo en el informe de asistencia.
- Valore los apoyos necesarios (policía, bomberos, otras unidades SAMUR,...)
- Informe a la Central del tipo de incidente, número aproximado de víctimas y gravedad de las mismas, accesos más favorables para apoyos solicitados, etc.
ESTIMACIÓN INICIAL
- Será rápida, en menos de treinta segundos. Tiene por objeto conseguir una impresión de gravedad del o los pacientes.
- Compruebe el nivel de conciencia del paciente, valorando su estado:
- Consciente (se valorará pulso y respiración).
- Inconsciente (implica apertura de vía aérea seguida del resto de la valoración inicial). Todo ello realizado con alineación con control manual cervical.
- Compruebe el estado respiratorio del paciente, atendiendo a frecuencia respiratoria aproximada (eupneico, bradipneico o taquipneico) y la existencia o no de disnea. Valore simetría y adecuada expansión de ambos hemitórax.
- A la vez que comprueba la respiración, estime el estado hemodinámico:
- Palpe pulso, frecuencia aproximada, amplitud del mismo, estimando un estado tensional aproximado:
- Pulso radial presente: > 80 mmHg de TAS
- Pulso femoral presente: > 70 mmHg
- Pulso carotídeo presente: > 60 mmHg
- Valore el relleno capilar y perfusión tisular (palidez, sudoración, frialdad...)
- Calcule la escala AVDN (Alerta, reacción al estímulo Verbal, al Dolor o No respuesta) o, en su defecto, mida el componente motor de la escala de coma de Glasgow (GCS).
- Al final de esta estimación inicial, se debe de tener una idea preliminar y aproximada del estado del paciente, estando en disposición de realizar una clasificación de víctimas, en el caso de que hubiera más de un paciente o se tratara de un AMV (ver procedimiento operativo: AMV), y/o de iniciar maniobras de resucitación, si son necesarias.
VALORACIÓN PRIMARIA Y SOPORTE VITAL
Durante esta fase, el paciente es atendido en equipo:
- El médico se situará, preferentemente, a la cabecera del paciente con el maletín de respiratorio,
- el DE a uno de los lados con maletín circulatorio,
- el TATS realizará el apoyo logístico para el resto del equipo de actuación inicial (monitorizaciones: ECG, Pulsioxímetro, Capnómetro).
Esta disposición en torno al paciente permite la instauración por los distintos componentes del equipo de múltiples actos diagnóstico - terapéuticos simultáneos, que singularizan y determinan nuestra valoración y reanimación primaria.
La disposición en grupo de actuaciones es orientativa y tiene como base establecer las prioridades de actuación habituales en la emergencia extrahospitalaria. Es posible variar de grupo las actuaciones en función de las necesidades del paciente.
A) Primer grupo de actuaciones
- Permeabilice la vía aérea con control cervical, si no lo ha hecho ya.
- La maniobra inicial de apertura de vía aérea, en estos pacientes, será la de elevación mandibular, fijando la frente.
- Coloque cánula orofaríngea tipo Guedell.
- Coloque collarín cervical sabiendo que no es la inmovilización definitiva, y que no se debe descuidar el control manual sobre la columna cervical.
- Si necesita ventilación con presión positiva, hágalo con el balón de reanimación con reservorio conectado a fuente de oxígeno a alto flujo. Realice la maniobra de presión cricoidea (maniobra de Sellick).
- Controle aquellas hemorragias masivas que puedan comprometer la vida del paciente en poco tiempo.
- Proporcione oxígeno a alto flujo si el paciente está consciente y no va a ser aislada su vía aérea.
- Coloque el pulsioxímetro.
- Canalice una vía venosa periférica del mayor calibre que permita el paciente.
B) Segundo grupo de actuaciones
- Ausculte al paciente. Si tiene constancia de neumotórax a tensión, neumotórax abierto, volet costal o rotura de la vía aérea, actúe según el procedimiento de traumatismo torácico
- Aísle vía aérea mediante intubación si es preciso, según procedimiento de manejo de vía aérea. Si no consigue una vía aérea intubada tras varios intentos, y no tiene la posibilidad de que alguien lo haga por usted, use técnicas alternativas: Airtraq® u otro método que se encuentre disponible en el servicio. Realice cricotiroidotomía, en último lugar.
- Valore el relleno capilar y compruebe el estado de perfusión tisular viendo el color, la temperatura de la piel y la sudoración. Compruebe el ritmo, la frecuencia y la amplitud del pulso.
- Determine la TA y ETCO2.
- Valore la existencia de taponamiento pericárdico y shock, y actúe según procedimientos.
- Monitorice ECG del paciente.
- Administre fluidoterapia moderada, evitando sobreexpandir (mantenga la TA del paciente entre 90-100 mmHg de TAS) con una perfusión de cristaloides, alternando coloides si la respuesta es insuficiente.
- Valore la realización de analgesia y sedación según procedimiento.
C) Tercer grupo de actuaciones
- Observe el tamaño, la simetría y la reactividad pupilar. Calcule la escala de coma de Glasgow (GCS) y efectúe una exploración sensitivo-motora periférica.
- Valore la necesidad de canalizar una segunda vía venosa de grueso calibre.
- Realice las valoraciones analíticas necesarias: glucemia, gasometrías, analítica de iones, etc.
TRASLADO PRIMARIO A LA UNIDAD
Inmovilización y movilización primaria. Movilice al paciente desde su posición inicial, al decúbito supino, utilizando técnica necesaria: desincarceración con férula espinal tipo Kendrick, puente holandés, tabla espinal, camilla de cuchara y correas de sujeción, etc. Valore la colocación de férulas ante deformidades o fracturas. Es importante, si la situación del paciente lo permite, que antes de producir maniobras dolorosas analgesie al paciente, esperando a que el fármaco haga efecto.
Ver Técnicas: Trauma, técnicas de movilización de pacientes
Inmovilización secundaria. Fije correctamente los instrumentos diagnósticos necesarios para monitorización y los dispositivos terapéuticos aplicados: sondas, vías, tubos, mascarillas de O2, así como realice la fijación del propio paciente para traslado al habitáculo asistencial.ver Técnicas: Trauma, técnicas de inmovilización
VALORACIÓN SECUNDARIA Y ESTABILIZACIÓN
- Realice, en equipo, todas aquellas valoraciones y acciones terapéuticas no realizadas en la valoración primaria. Se realizará preferentemente en la unidad asistencial, intentando ofrecer un ambiente térmico adecuado.
- Realice una breve historia médica. Reséñelo en el informe de asistencia (no olvide reseñar si ha habido movilización previa de la victima, así como, la valoración del mecanismo lesional).
- Realice reevaluación del estado del paciente:
- Realice una evaluación sistemática del paciente, desde la cabeza a los pies y por aparatos, usando la inspección, la palpación, la percusión y la auscultación.
Cara
- Realice una exploración facial completa de ojos buscando enucleaciones, cuerpos extraños, hemorragias, laceraciones, ojos de mapache, agudeza visual...
- Busque deformidades o desgarros, hemorragias, LCR en nariz y pabellón auricular. Explore igualmente la boca, en la que, además, podrá encontrar laceraciones de la mucosa o de la lengua, fracturas dentales, cuerpos extraños, etc.
- Compruebe integridad de las estructuras óseas o, en su defecto, hundimientos, crepitaciones, fracturas, luxaciones mandibulares, etc.
Cráneo
- Busque cualquier alteración traumática de la estructura ósea, además de scalps (signo del escalón), salida de LCR, signo de Battle en apófisis mastoides, etc.
Cuello
- Dentro de las estructuras blandas, busque pulsos carotídeos bilaterales, heridas, heridas sibilantes, enfisema subcutáneo.
- Compruebe la posición y desviación traqueal.
- Con respecto a las partes óseas, busque lesión cervico-medular (dolor, crepitación, desviaciones...)
Tórax
- Examine la pared investigando heridas, asimetría de movimientos respiratorios, deformidad y existencia de crepitación.
- Ausculte. Piense en la contusión, tanto pulmonar como cardiaca (con especial atención a la aparición de arritmias).
Abdomen
- Descarte abdomen quirúrgico primando, en este caso, la llegada urgente a quirófano frente a una estabilización prolongada.
- En el trauma abdominal cerrado, indague en busca de contusiones, heridas, hematomas, defensa abdominal, abdomen en tabla (síntoma de peritonismo).
- Ausculte previamente a la palpación.
- Coloque sonda nasogástrica, siempre que no esté contraindicada, para disminuir presión intrabdominal.
- En el trauma abdominal abierto, no retire los objetos penetrantes, fíjelos. No reintroduzca asas, limítese a cubrirlas con paño estéril y humedézcalas con suero caliente.
Zona perineal
- Compruebe la existencia de desgarros, heridas hematomas y/o sangre en meato urinario.
- Valore efectuar un tacto rectal (busque sangre en recto, líquido en el fondo de saco de Douglas y escalón óseo en sínfisis).
- En el tacto vaginal, además, podrá evidenciar fracturas "abiertas" de pelvis.
- Coloque una sonda vesical, si no está contraindicada (sangre en meato, y/o hematoma en glande o zona escrotal).
- Compruebe la existencia de sensibilidad en zona perineal.
- Valore la presencia de reflejos sensitivos (glande – esfinteriano) y priapismo como signos de posible lesión a nivel medular.
Pelvis
- Sus fracturas pueden conllevar una gran pérdida hemática.
- Busque deformidades, heridas, hematomas, crepitaciones.
- Palpe e inspeccione. Valore realizar la presión sobre espina ilíaca antero superior para descartar fractura pélvica dado que un porcentaje de ellas son indoloras y esta maniobra puede remover el tapón hemostático.
- Inmovilice pelvis con cinturón pélvico (ver Técnicas: Trauma, técnicas de inmovilización: Cinturón pélvico).
Extremidades
- Busque fracturas abiertas o cerradas, luxaciones y lesiones músculo - ligamentosas.
- Proceda a efectuar una valoración vasculonerviosa distal continua.
- Realice sedoanalgesia previamente, tracción lineal manual e inmovilice aquellas fracturas que lo precisen mediante el sistema más adecuado al caso, y retire todos aquellos elementos que puedan comprometer la circulación y/o el retorno venoso (anillos, pulseras etc.) (ver Técnicas: Trauma, técnicas de inmovilización).
Espalda
- Explore con movilizaciones controladas en busca de heridas, deformidades, dolor, etc.
- Efectúe una valoración motora y de las sensibilidades propioceptiva y epicrítica.
- Realice aquellas pruebas diagnósticas no efectuadas hasta ahora: glucemia, gasometría arterial, bioquímica, etc.
TRASLADO A CENTRO ÚTIL
- Realice preaviso hospitalario y traslado en USVA al centro de referencia que le corresponda conforme al procedimiento de Código 15, aportando la información necesaria al centro receptor.
- Realice manejo postural en las patologías que lo requieran: TCE, traumatismo torácico, etc.
- Efectúe un traslado a la velocidad más constante posible, y por el camino más conveniente (que no tiene por qué ser el más corto), manteniendo las medidas diagnóstico-terapéuticas iniciadas, y reevaluando al paciente en caso de aparecer nuevos síntomas o un agravamiento de su estado.
- Solicite apoyo de policía para asegurar un traslado controlado a velocidad constante.
- Realice la transferencia de información verbal y escrita, y del paciente al médico y enfermera receptores.
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Manual de Procedimientos SAMUR-Protección Civil · edición 2010 4.0 |